viernes, 28 de septiembre de 2012

Un regalo desde Estonia.

Recientemente una amiga me a traído estas dos piezas de agua de Estonia. Una de ellas desgraciadamente es genérica, pero os puedo asegurar, palabra de quien me la ha traído desde allí, que era de una botella de agua con la hizo una de sus comidas. Como tal, con el mismo cariño que a las demás la pongo en la colección.

1 comentario:

  1. ¡Qué poco nos aportan estas chapas lisas, vacías! Algunas sólo son el metal limpio. Algunas cervezas artesanas, como Burro de Sancho, de Toledo, usan colores distintos para cada variedad, y otras le añaden un pequeño adhesivo. Han olvidado que la chapa sigue rulando y es, por tanto, un soporte publicitario. Cada vez más lejos de aquellas gaseosas locales con el logo en relieve.

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